La introducción de tu TFG es una parte fundamental de tu Trabajo Final de Grado, ya que es la que abre la puerta al resto de tu investigación y te permite introducir el tema a desarrollar. A continuación te contamos los mejores consejos y recomendaciones de los expertos para que puedas elaborar una introducción de un TFG perfecta.
Busca la finalidad de tu trabajo
En primer lugar te recomendamos que busques la finalidad de tu TFG y presentes el tema. Piensa cuál es el propósito de la investigación que vas a realizar y cuál es el tema que tienes pensado escoger y preséntalo de manera que vayas a despertar el interés de los lectores usando ejemplos claros de artículos actuales. Asimismo, es importante que dejes claro cuál es la relevancia a nivel práctico y científico de tus estudios.
Encuentra un motivo para tu investigación
Por otro lado es fundamental que tengas claro y lo plasmes de esta manera en tu investigación cuál es el motivo de tu TFG. Puedes haber elegido un tema porque siempre haya llamado tu atención o porque un artículo reciente te haya sorprendido. Te recomendamos escoger un ejemplo que sea interesante para poder animar a los lectores a leer el resto de tu trabajo.
Describe el tema de forma concreta
Es muy importante que tengas en cuenta que debes describir de forma concreta y relevante el tema a tratar en la introducción de tu TFG. Para ello debes basarte en la exposición del problema o en la finalidad de tu trabajo. Define el tema de manera directa y por supuesto no investigues en exceso ni busques hacer un trabajo muy amplio sino mejor especialízate y consigue hacer un trabajo lo más preciso posible porque aprenderás más y al mismo tiempo conseguirás una mejor valoración por parte de los profesionales y del tribunal encargado de valorar tu trabajo.
Establece la relevancia científica
Es muy importante incluir en la introducción de tu TFG cuál es la relevancia científica de tu investigación. Para ello es fundamental utilizar argumentos, citar artículos científicos o combinarlos para conseguir crear una buena base. Es importante que incluyas también los diferentes capítulos, estudios, etc. que vayas a usar para realizar tu investigación. Después también es importante incluir el uso práctico de la investigación que vas a llevar a cabo.
Usando argumentos, establece la relevancia científica de tu investigación. Puedes hacer esto citando artículos científicos y combinándolos. Además, destaca aquí los capítulos de discusión de estudios que vas a utilizar para tu propia investigación.
Por otro lado también debes incluir las ventajas o aplicaciones prácticas que puede tener tu trabajo para un sector, una industria o una rama del conocimiento.
Incluye el “Estado de la cuestión”
Además, como nos han recomendado los expertos de Tustrabajosuniversitarios, quienes tienen muchísima experiencia ayudando a universitarios con sus Trabajos Final de Grado y Trabajos Final de Máster, ayudándoles a conseguir grandes resultados, es importante que en la introducción incluyas también el “Estado de la Cuestión”, que no es otra cosa que incluir los artículos científicos más relevantes relacionados con el tema que piensas tratar y explicarlos de forma breve. De esta forma podrás explicar que has preparado el tema y al mismo tiempo contarás con una buena base para preparar un trabajo especialmente interesante.
Describe tus objetivos
Por otro lado, es fundamental que describas de forma directa y concreta los objetivos que quieres conseguir con tu TFG. Debes explicar los objetivos y después debes responder a la exposición del problema formulando diferentes preguntas o interrogantes que quieres responder con tu trabajo. Además también puedes usar hipótesis en lugar de preguntas de investigación, que no deberías olivarte tampoco de mencionar en este punto.
Explica la metodología
En este punto es muy importante que expliques la metodología que vas a implementar en los siguientes puntos de tu trabajo para conseguir que el lector entienda el tipo de estudio que tienes pensado realizar. No tienes que explicarla de forma concreta sino simplemente ofrecer un resumen de la metodología que has utilizado, del sector que has escogido u acotado para realizar la investigación, etc. Más adelante en el apartado correspondiente ya especificarás la metolología completa incluyendo el tipo de encuestas utilizadas u otros datos relevantes, por lo que en este espacio simplemente debes resumir este apartado e introducirlo en un pequeño párrafo.
Estructura tu trabajo
Por último es fundamental que estructures a la perfección todo tu trabajo en la introducción para que todo el mundo pueda ver cómo está construido y entenderlo de forma más eficiente viendo las diferentes partes que vas a tratar hasta llegar a unas conclusiones concretas y bien explicadas. En este punto los expertos recomiendan resumir todos los capítulos de forma breve en un párrafo como máximo para que la introducción no se haga muy pesada. El esquema de tu trabajo debe ser claro y conciso, resultar entretenido y animar a seguir leyendo.