Las estadísticas, pese a no ser oficiales, suelen constatar que el tiempo medio para vender una vivienda en España puede alargarse hasta los 9 meses de tiempo de manera sencilla. Esta, lógicamente, es una situación que no te beneficiará si lo que necesitas es vender tu vivienda con determinada urgencia para conseguir el dinero que requieres.
Es posible que un inmueble pueda venderse antes de los cuatro meses si cumple con algunos requisitos necesarios, como un precio idóneo y adecuado a lo que marca el mercado para viviendas de características similares en esa zona, si está reformada o si es una vivienda relativamente nueva y si dispone de una atmósfera neutra a la hora de recibir las visitas de los primeros compradores potenciales.
Para conseguir que puedas vender tu domicilio de manera urgente, queremos ofrecerte una serie de consejos y recomendaciones que harán que tu casa pueda ser vendida con más facilidad.
Comprueba que tienes toda la documentación que será necesaria para la venta
De nada sirve que pongas a la venta la casa si no tienes disponibles los documentos que serán imprescindibles para firmar la venta y que podrían complicar el proceso e incluso paralizarlo.
Por ello, antes de publicar tu casa, te recomendamos que consigas el contrato original de compraventa donde aparezcan tanto no nombre como el de la empresa promotora de la finca o la casa, las escrituras (que, además, deberán estar dadas de alta tanto en el Catastro como en el Registro de la Propiedad), la liberación de crédito si la adquiriste con una hipoteca o la confirmación de que estás al día en las mensualidades de la hipoteca, los planos arquitectónicos si los tienes, y los certificados que demuestren que estás al día de pagos como el IBI, gastos de comunidad y los suministros de luz, agua y gas.
Prepara la casa lo antes posible
Desde el momento en el que tomes la decisión de sacar a la venta tu vivienda, deberás empezar a preocuparte de hacer que ésta esté preparada. Lo normal es que dediques al menos un mes para ponerla al día, hacer las reparaciones que resulten pertinentes, ordenes tus pertenencias y puedas elaborar una estrategia de visitas.
Arreglar los pequeños desperfectos puede ayudar de manera exponencial a que tu casa sea mucho más fácil de vender. Pinta las estancias, arregla las cisternas si pierden agua, cambia la grifería si gotea… Ese tipo de mejoras hace que los futuros compradores las valoren muy por encima de lo que realmente te haya costado y, además, servirá para que no se devalúe el precio de tu vivienda.
Haz que el ambiente en la visita sea neutro
Lo importante cuando un posible comprador entre en tu casa será que consiga visualizarse viviendo en ella, algo que resultará muy difícil si tus objetos personales están esparcidos por la vivienda. Además, si realiza la venta a través de una inmobiliaria, suele ser mejor que no estés presente, ya que los clientes tendrán una mayor libertad a la hora de moverse por la casa, sin sentirse observados ni presionados por tu presencia.
Otra opción es vender tu casa de manera directa a especialistas en la compra de casas, como es el caso de pisoalcontado.com, que podrán comprar incluso tu mitad de una vivienda o la parte proporcional de la misma que te corresponda, bien sea por una herencia o por un divorcio.
Pon especial cuidado a la hora de describir tu casa
Resulta de especial importancia que tengas especial audacia a la hora de escribir la descripción de tu vivienda. Trata de hacerla llamativa, sin caer en la redacción robotizada. Además, será imprescindible que consigas unas buenas fotografías de la vivienda, ya que son la parte más visual que verá el cliente antes de la visita y que decidirán si quieren molestarse en una visita o no.